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Las tostadas francesas son un clásico que nunca pasa de moda, pero para llevarlas al siguiente nivel, el ingrediente clave es nuestro pan tajado de leche. Su suavidad y sabor único lo convierten en la base ideal para crear unas tostadas francesas irresistibles, perfectas para un desayuno o brunch inolvidable.
1. Preparar la mezcla: En un bol, bate los huevos junto con la leche, la esencia de vainilla, el azúcar y la canela en polvo. Asegúrate de que todos los ingredientes estén bien integrados para que cada rebanada de pan quede impregnada con el sabor perfecto.
2. Sumergir el pan: Sumerge cada rebanada de pan tajado de leche en la mezcla de huevo, asegurándote de que el pan absorba bien el líquido. Deja que repose unos segundos por cada lado.
3. Freír las tostadas: Calienta una sartén a fuego medio y añade una cucharada de mantequilla. Cuando esté derretida y burbujeante, coloca las rebanadas de pan en la sartén. Cocina cada lado hasta que estén doradas y crujientes, aproximadamente 2-3 minutos por lado.
4. Servir: Retira las tostadas de la sartén y colócalas en un plato. Puedes acompañarlas con miel, jarabe de arce o espolvorear un poco de azúcar glass. Para un toque fresco, añade frutas como fresas, arándanos o plátanos en rodajas.
Soy calidad no cantidad,
pruébalo y te convencerás.
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